28 DE JULIO

Hace frío, deben ser las nueve de la mañana y veo que mi vieja viene bajando seria y contenida. Camina lento y la calle pareciera ser mas larga de lo común, se sube a la vereda y continua por el costado de la casa... viene con los brazos cruzados noto que tiene frío. Llega hasta la puerta de calle, se detiene un minuto luego abre la puerta, mira la escalera, sube lento, se detiene en la puerta de arriba mira un momento y golpea. Mi tata se acerca, la puerta tiene vidrios, corre la cortina y mira antes de abrir, se miran, hay silencio, el abre la puerta. Mi vieja mira por el pasillo hacia mi puerta y camina lo mas lento que puede, entra, se para a los pies de mi cama... me mira...

hace un movimiento con la intención de despertarme, pero yo ya he abierto los ojos, la miro

-Se murió mi nana- Le digo y ella mueve la cabeza indicando que si -Fue a las 7 de la mañana- le digo yo, ella me mira interrogante -te vi venir- pero ella no entiende a lo que me refiero y en esos momentos no le interesa

-vistete- me dice mientras yo siento que el suelo se mueve y que el aire es mas espeso -hay que avisar a los de Santiago- y me encomienda esa tarea a mi.

En esa época no teníamos teléfono y tuve que caminar hasta el otro cerro para llamar desde un kiosco, pero antes de ir a avisar paso por la casa y veo con mis ojos que mi nanita ya no esta, solo esta su cuerpecito pequeño ¡nunca note que fuera tan pero tan pequeño! le doy un beso y parto a llamar por teléfono. El caballero del kiosco me mira con pena, yo quisiera que me abrazara siento que no me puedo el cuerpo.

Mi casa esta en estos momento lejos, a no se cuantas cuadras, pero al final de esta calle esta la casa de mi ex pololo y sus hermanas son mis amigas y su mama ahhh su mama es tan buena conmigo, me voy para allá. Toco el timbre la primera que me ve es mi mami tere (así la llamo) ella entiende de inmediato lo que pasó, ella me abraza ¡por fin un abrazo! y lloro, lloro con tanta pena ¡se me fue mi nana, mi nanita querida, la única persona que me quería sin ninguna obligación de quererme! la persona que mas me ha querido junto con mi madre.

Mis amigas no están, se fueron a un retiro y mi ex pololo escucha que alguien llora y se asoma a ver quien es, me abraza, me dice que lamenta lo ocurrido y que ella le caía bien. Yo aprovecho un momento en el que quedo sola y me voy sin despedirme, quiero volver antes de que la pongan en el ataúd, quiero darle otro beso.

El momento es complicado, triste, solitario, me acerco a ella y me pongo a llorar nuevamente y le pido al oído que me lleve con ella, pero ella no responde, ella ya no esta en ese cuerpo.

De esto ya han pasado quince años, yo aun la recuerdo, la extraño y la amo y aun me pregunto porque tuvo que partir tan joven.