24 DE SEPTIEMBRE
El sábado 24 de septiembre le celebramos el 8º cumpleaños de mi princesita. Los invitados no fueron tanto como el año pasado, solo 16 en total (incluyendo a la festejada) tal como el año pasado mi vieja le regalo el arriendo del juego inflable y en esta oportunidad hasta mi pajarito se tiro y lo disfruto a concho. Fue un día lindo y lo pasamos bien.
Ahora haciendo un balance de los cumpleaños que le he hecho a mis niñas debo decir que hay ciertas constantes de las cuales me he percatado, por ejemplo:
Si una organiza el cumpleaños tiene que tener abundante comida para todos los invitados para que después no se vayan pelando, pero si eres invitado entonces come con discreción para que no digan que te lo comiste todo jajajajaja
Siempre habrán niños intruseando las bolsas para ver cual es el mejor juguete y así poder elegir donde sentarse (por eso las hago todas iguales)
También esta la infaltable mama que sus niños no comen torta, pero hacen que la pidan igual para llevarsela a la casa y el niño en su inocencia remantandola con un "a mi no me gusta la torta pero mi mama se la quiere llevar, ella ya comió torta" jajajajjajajaja y la mama con cara de ¡cabro´e mierda!
Los niños que las mamas dejan y después van a buscar son un terremoto andante ¡armense de paciencia!
Todos los niños piensan (sin importar su valor) que su regalo es el mejor, por eso los voy mirando y diciendo que las cosas son todas muy bonitas
Y así hay un montón de cosas en las cuales me he fijado, pero la mas importante de todas es:
Que cuando están los amiguitos cantando el cumpleaños feliz a tu hija su sonrisa denota felicidad pura.